10.5.11

I need a hero

Ya ha pasado casi medio año desde que di señales de vida. Las excusas son las de siempre. Falta de tiempo por vida ajetreada, aunque esta vez con algo de fundamento. Desde Febrero estoy trabajando en una empresa de verdad. Mi primer trabajo de persona adulta después de la Universidad. Una empresa más gorda me contrata a mi a través de la pequeña pero creciente para la que yo trabajo y mi puesto está solo a unos 300 metros de mi anterior oficina en la Uni. De todas maneras, la dinámica es muy diferente y ahora me tengo que despertar entre semana con el despertador, qué horror!!
La otra excusa para mi silencio también es bastante razonable. A finales de marzo intenté practicar patinaje artístico. Claro, nadie me dijo que con una bici no es la mejor manera y cataplof, escayola que te pongo. Tuve el brazo derecho enyesado durante casi un mes. En ese tiempo perfeccioné mi escritura con la mano izquierda e incluso aprendí a utilizar un dedo de la mano derecha escayolada al teclear.
Pero ayer, al salir de casa, tuve una visión reveladora en la calle. Un reencuentro con un héroe de la juventud, como podéis ver en la foto. Si el gran Burmar Flax (de a duro) había conseguido llegar hasta detrás de mi casa en Tampere, qué demonios hacía yo que no podía sacar un ratito para mi gente querida? A ver si puedo contar algunas cosas de las que han pasado que tengan que ver con las peculiaridades del país que me acoge...
Nada más empezar en el trabajo, conseguí que me mandasen a un curso de formación. El curso lo daban en Ruka, una estación de esquí tirando para el norte de Finlandia. La primera vez que fui a un curso a Ruka, allá por 2000, fuimos como escolares, en autobús parando por todas las ciudades de camino y recogiendo a participantes del curso. Con esto del progreso, ahora tocaba ir en avión, y encima Finnair había pintado el avión de mi vuelo en los antiguos colores de la aerolínea. Así da gusto ir a cursos: 4 horas de curso, 4 horas de esquí y luego otras 3 horas de curso. Cena en común, precalentamiento en casa y a cantar y bailar en el karaoke. Esquiar medio dormido y a 15 grados bajo cero parece imposible, pero con el buen tiempo que hacía y lo bonitas que estaban las pistas, hubiese sido criminal quedarse echándose la siesta.

La última noche de fiesta la pasamos de nuevo en el Karaoke de la estación de esquí. No había mucha gente, ya que era entre semana y fuera de temporada. Una de las pocas clientas ajenas a nuestro grupo y que ya había empinado bastante alto el codo decidió hacernos una exhibición de baile en nuestra mesa. Poco a poco iba encontrándose en su salsa y sacándonos a bailar encima de la mesa. Adivináis quién fue el tonto que subió a bailar con ella, no? Pues el principio del show bien, pero ella iba dejándose llevar y los alaridos de mis compañeros de curso la animaban más y más. En un momento dado se agarró de unas barras que había en el techo, y, en un alarde de serdo dansing, me engarzó con las piernas alrededor de mi cuerpo y se puso a dar sacudidas de Elvis the Pelvis. Cuando me quise dar cuenta, los brazos de la pobre torita le habían fallado y fue a dar directamente con su cogote contra la mesa sin que yo lo pudiese evitar. Tuvo la entereza de levantarse y tambalearse hasta un sofá, murmurando que estaba bien. La realidad era bien diferente, al rato perdió el conocimiento y una ambulancia tuvo que llevársela al hospital. Lo que nos costó convencer al puertas del bar de que además de estar borracha necesitaba ayuda! Al final todo se quedó en un susto y una fuerte contusión, según nos contaron los de la ambulancia y los del bar al día siguiente.
Me acabo de dar cuenta de que aún quedan un montón de aventuras y ya he soltado un buen rollazo hoy. Y además está la otra excusa: Kirsi ha llegado a casa y vamos a tomar algo y a acostarnos, que ya es tarde. Así que me las guardo para la siguiente ocasión, espero que pronto.
Perdonad que últimamente haya estado desaparecido, pero os echo de menos igual. Feliz verano! Aquí ya los días son de 5 a 22 y hoy hemos tenido 20 grados.
Por cierto, creo que hoy me han llegado los papeles para votar. en la comunidad de Madrid. Por primera vez he tenido que pedirlos de antemano, me imagino que así habrán reducido algo gastos y sobre todo, el número de votantes en las elecciones. Alguna buena sugerencia? O mejor demostrar el asco a nuestros políticos vomitando dentro del sobre?
Besitos!

2.1.11

HEL-FRA-MAD a través de tres culturas


Ya estamos en 2011! El final de 2010 ha sido de lo más movido, así que voy a colar en esta primera entrada del 11 mi última experiencia en Finlandia. Última porque me pasó cuando viajaba de Helsinki a Madrid a pasar las navidades en familia.
Tenía mi vuelo de Helsinki a Madrid via Frankfurt el 21, justo cuando estaba cayendo la del copón en Europa central y Frankfurt las pasaba canutas para quitar la nieve. Curioso, el año pasado también volé en la misma fecha... Al poco de facturar la maleta nos comunicaron que nuestro vuelo saldría con retraso. Sin problema, en Frankfurt había 3 horas entre vuelos, un buen colchón para imprevistos. Con toda la tranquilidad del mundo me acerco a nuestra puerta de embarque cuando ocurrió una cosa que jamás me había pasado en ningún vuelo. El comandante del vuelo, en este caso una joven piloto alemana de Lufthansa salió del avión, cogió el micrófono de la puerta de embarque y en un ejercicio de transparencia nos detalló a los pasajeros la situación:
'En Frankfurt están aterrizando 2 vuelos por hora. Llevo 3 días intentando volar a Alemania para ir con mis hijos, sin conseguirlo por el temporal . He conseguido que nuestro vuelo sea el último que se cancele, pero si nos dan permiso tenemos que estar listos para despegar en cuanto nos asignen una ventana. Los pasajeros que así lo deseen pueden intentar buscar otros vuelos. Los que quieran intentar volar conmigo, tendrán que embarcar ahora y posiblemente esperar 4 horas, que es cuando tenemos la primera posibilidad de aterrizar, ya qus si nos dan la luz verde, tenemos que estar listos para despegar inmediatamente. Es posible que al final no volemos, pero también que se acorte el tiempo de espera, la situación puede cambiar en cada instante.'
Acto seguido, la Frau Piloto atendió con infinita paciencia y amabilidad a cada uno de los viajeros que le pedían más explicaciones. Chapeau por ella! Pero aún venían más dificultades en la aventura: Mi vuelo de enlace de Frankfurt a Madrid acababa de ser cancelado. Qué hacer? Si consiguiesemos llegar a Frankfurt, sería capaz de seguir hacia el sur? Mientras el pasaje se pensaba si embarcar, salí a ver si podía cambiar los vuelos... para encontrarme una cola de varias horas ante los mostradores de Lufthansa. 'Que me lleve Frau Piloto, que si alguien es capaz de sacarme de Helsinki hoy, será ella,' me dije y volví al embarque. De hecho, existía la posibilidad de que una vez en el aire nos desviasen a otro aeropuerto, por ejemplo Munich, y quizás desde allí podría seguir hasta Madrid con menos dificultades que desde Frankfurt. Imaginad mi sorpresa al ver que iban embarcando con cuentagotas, para desesperación de la piloto. El sistema informático del aeropuerto de Helsinki estaba haciendo de las suyas y la azafata de tierra, una guapa finlandesa, iba apartando pasajeros que el sistema no aceptaba para arreglar el desaguisado a mano. Sin prisa, siguiendo la norma, inflexible y totalmente ajena al hecho de que el vuelo en sí ya era una desviación de la situación normal. La piloto, desesperada por tenernos dentro de una vez, decretó un embarque libre, una posibilidad que al parecer tienen los comandantes de vuelo en situaciones determinadas. Ni caso. La impasible azafata de tierra seguía separando pasajeros y tecleando sus datos en otro terminal de ordenador. Unos 3 minutos por pasajero apartado y ya eramos más de 20. Fue entonces cuando la piloto agarró a uno de los encargados de embarque de más rango y le repitió con vehemencia: 'No lo entiende?! Vamos a hacer un embarque libre, AHORA!' Creo que visualicé los engranajes mentales del encargado de embarque finlandés, chirriando ante una orden que requería salirse de la norma establecida. Al final, el señor accedió y se lo explicó a la azafata, que de morros dejó pasar a los pasajeros, aunque visiblemente aliviada por haber recibido la orden de un superior y no haber tenido que correr ella con la responsabilidad.
Bieeen, a embarcar! Nada más llegar a mi asiento, oigo cuchichear detrás de mi, en la lengua de Cervantes: 'Mira a aquella. Esa es la típica alemana que para meter su equipaje de mano en el compartimento, aparta de malas maneras los bultos de los demás. Y mira a aquél. Ese es el típico finlandés que dobla con sumo cuidado su gabardina para que no se arrugue.' No pude evitar girarme e interrumpir la conversación: 'Parece ser que andan por aquí los típicos españoles con su típica agudeza de clasificar los comportamientos típicos de cada nacionalidad.' Pero bueno, lo dije en tono amable, y como siempre en situaciones de problemas de vuelo, acabamos haciendonos amigos de viaje todos los viajeros sentados cerca los unos de los otros.
No estuvimos ni dos horas cuando la Frau Piloto nos comunicó (y se le notaba la alegría en la voz) que nos ibamos a Frankfurt! Una vez en la capital de Lufthansa oí que a los que volaban para Madrid nos atendían en la puerta de embarque 16. Allí habían aparcado un jumbo a Barcelona, y la azafata de tierra, una morenita de Lufthansa, me ofreció tomar este vuelo, que al menos estaba asegurado que saldría en 15 minutos, ya que la única posibilidad a Madrid aún no estaba confirmada. Le di mi tarjeta de embarque, dos tecleados al ordenata y voilá, camino al sur, sin burrocracias ni formularios!
Ya en Barcelona, sobre las 10 de la noche, nos quisieron mandar a Madrid en autobús, pero unos pocos viajeros y yo nos escaqueamos y conseguimos que nos colasen en un vuelo de por la mañana. Estábamos en España y se notaba: El señor de personal de tierra de Lufthansa se intentaba lavar las manos, diciendo que como era un vuelo operado por Spanair, ellos se tenían que hacer cargo del hotel y de los nuevos vuelos (a mi el hotel me daba igual, yo quería salir con mis amigos por Barcelona). El contrapunto, igualmente español, era Montse, un ángel sin alas de Lufthansa que nos cuidó y negoció con los de Spanair hasta que nos pusieron el vuelo y el hotel.
El hotel estaba en el Prat del Llobregat y yo quería ir al centro de Barcelona. Llamada al taxi. 'En 5 minutos estoy ahí.' Segunda llamada al taxi a los 20 minutos. El taxi llegó por fin 10 minutos más tarde, justo cuando me había pedido un botellín de cerveza y va el taxista bakala y me dice al subir al taxi tuneado que por favor tuviese cuidado que no me viese la policía beber. El momento zen total me sobrevino en un semáforo en rojo en el barrio de Gracia. Cruzaban unas chicas cuando exclama el taxista: 'Pero tú has visto eso!?!? Si se le ve todo!' Refiriendose a una rubia alta de minifalda. Y al momento abrió la ventanilla del taxi, se puso a silbarle a la rubia ese silbido que sólo conozco de Iberia, aspirando el aire en vez de echándolo, y a gritarle esa elevada frase de 'RUBIAAA!!'
Sí, sin lugar a dudas estaba en España...
Os deseo muchos imprevistos con final feliz para 2011!


6.11.10

Dr. Tob

Pues parece que este es la segunda entrada en todo este año, cuando la primera iba cargada de buenas intenciones de principio de año de actualizar frecuentemente las vivencias finlandesas... Lamentablemente, el trabajo se interpuso entre mi y mis buenas intenciones. Aunque he tenido un año repleto de aventuras y emociones, había una espada de Damocles pendiendo sobre mi cabeza y por fin el viernes de la semana pasada ha caído. Por suerte me ha dado tiempo suficiente para esquivarla. El caso es que desde el miércoles pasado es oficial, soy Doctor Ingeniero en Telecomunicaciones, YUHUUU!!
El viernes fue la defensa. Le había estado dando vueltas a la tesis desde la primavera, y la entregué contrarreloj en verano, con la vista puesta en defender a mediados de noviembre. El plan era perfecto. La primera semana de Octubre bajaría con Pedro en coche a Eschwege (mi ciudad natal) para encontrarme con mi familia, y tendría tiempo de sobra para preparar la defensa. El road trip empezó como siempre: Foto con el lábaro cantabru presidiendo la imagen.
Las etapas fueron Tampere a Helsinki, desde donde continuamos en barco hasta Travemünde para llegar y arrasar Hamburgo, en donde por cierto hay 3 Hessbuger (el MacDonalds finlandes). De Hamburgo a Kassel, en donde han pensado que la gente mayor también tiene derecho a entretenerse en los parques. La noche fue bestial y al día siguiente nos recuperamos en los baños termales de Kassel. Si seguís el enlace, podréis ver que hasta tienen horario fijo para el momento en el que echan agua a las piedras de la sauna. Organización alemana! Por mucha recuperación, ya no nos quedaron fuerzas para seguir armándola en Eschwege, así que tras una birrita, a casa a dormir. Pedro se fue, vinieron mis padres, y lo que tenía que ser una semana de relax se convirtió en una semana de trabajo bajo presión porque resulta que la tesis la tenía que defender el último viernes de octubre ya.
En Finlandia la defensa de la tesis es una ocasión muy formal. El candidato decide si en la defensa se va de pingüino o de traje normal. Existe un protocolo formal de comportamiento durante la defensa, que puede durar hasta 6 horas, y tras ella se toma en la universidad un café acompañado de tarta. Después se descansa un poco y se pasa a la cena-celebración muy formal, llamada Karonkka, en la que se supone que se celebra a los oponentes del candidato y que el candidato tiene que organizar (y sufragar).
Así que sin darme cuenta se me echó encima la fecha de la defensa. Yo me intentaba preparar como podía para todo tipo de posibles preguntas maliciosas de mis dos oponentes, uno griego, el otro de Helsinki. Cuanto más releía mi tesis, más me daba cuenta de que podían preguntar todo tipo de cosas a las que no sabría responder. Y encima quedaban tantas cosas por organizar! Menos mal que Kirsi se encargó de la preparación de la Karonkka... Y de pronto estaba en la clase de la Uni, dando mi presentación primero y luego respondiendo a las preguntas de los oponentes. Allí en la foto estoy yo, enfrentado a los oponentes y con mi jefe arbitrando el combate. Bueno, él no podía decir nada, pero figuraba. Y de pronto, tras la primera pregunta, me sobrevino una relajación total y las dos horas de defensa se pasaron volando. En la foto podéis ver que mi jefe tiene encima de la mesa su sombrero de doctor. Esto es otra tradición nórdica. Sólo los doctores tienen derecho a tener un sombrero de esos. Tras la defensa una empresa que los hace me mandó un correo ofreciéndome uno a precio reducido si lo pedía antes de Diciembre... a 570€!!
Por la noche fuimos a la Karonkka al Finlayson Palatsi. Todos bien vestiditos y formalitos al principio. Menos mal que el vino empezó a hacer efecto rápido y ya con el plato principal las conversaciones se iban animando. Entre el principal y el postre es el momento oficial de las charlas y de dar las gracias a todo el mundo. Creo que me excedí en soltarles rollo, pero como podéis leer, tengo una tendencia hacia ello. Luego vienen las réplicas, quien quiere puede soltar su charla. Y después de cada charla se brinda... Vaya bálsamo para el ego, saldría midiendo tres metros de una Karonkka de esas si no fuera porque normalmente se sale a cuatro patas! La verdad es que fue muy bonito y emotivo, con la guinda final de mi padre manteniendo a todos en silencio pegados a sus palabras. Al final ya se desparramó todo y tuvimos una sesión habitual de Doris. Fue una pena no haber podido invitar a todos los que hubiera querido a la cena y que algunos de mis mejores amigos no estuviesen para celebrar esa noche, pero bueno, lo disfrutamos por ellos también.
La recuperación la tuvimos en la cabaña de Kintulampi, cocinando pizza en el horno de ladrillo que hay en la cabaña y comiendo demasiado, como siempre. Sauna y lago e incluso lago sin sauna, con el agua rondando los 7 grados!
Y así pasamos los últimos días en familia hasta que se fueron de vuelta mis padres y mi hermano para Madrid. En fin, desde el miércoles es oficial, me podéis llamar Dr. Tob. Os deseo un buen otoño a todos, aquí ya ha nevado!


















1.1.10

Feliz!


Creo que es el primer día de estas vacaciones en los que no tengo que preocuparme del trabajo y la verdad es que es buena forma de empezar el año. Los últimos meses en Finlandia habían sido de esos sin descanso por curro, quedadas y demás ocasiones. Aunque tuvimos nieve, no hubo la suficiente como para esquiar (al menos antes del 21 de Diciembre), pero conseguí ir con Kirsi una noche a patinar sobre hielo, a 20 grados bajo 0.

El 21 por fin me embarcaría para mis merecidas vacaciones con mi familia. Había encontrado una buena combinación con Ryanair, barata y desde Tampere, con escala en Bergamo (Bérgamo), cerca de Milán. Salida por la mañana, llegada a Barajas a las 18:15 de la tarde. Y encima daba la casualidad que también volaba en ese vuelo Belén, una amiga de Tampere. En el vuelo a Bergamo nos tocó sentarnos en la primera fila, con las piernas estiradas, charlando con las azafatas, saboreando ya en nuestras mentes la deliciosa cena que sin duda nos tenían preparados nuestros familiares. En Bergamo nevaba mientras seguíamos la rutina de la compañía esta de vuelos baratos: sacar las maletas y luego volver a facturar para volvernos a montar en el siguiente avión. Una vez embarcados, veíamos por la ventanilla como caían unos copones como patatas. Pasaba el tiempo y no se movía el avión, con un calor sofocante y los niños empezaban a ponerse nerviosos y llorar. A las 2 horas la gente empezó a pedir agua, y ni siquiera la vendían a las madres con los peques. Por fin, después de 3 horas en el avión, nos desembarcaron, con la esperanza de que el tiempo mejorase a las 2 horas. Belén se despidió del piloto con un 'hasta luego' a lo que este respondió algo así como 'lo llevas claro.'
Tras otras 3 horas de continuos 'se retrasa el vuelo' acabaron por suspenderlo y tanto el novio de Belén como mi padre se pusieron a mirar alternativas para el día siguiente. Por suerte había un vuelo asequible a Zaragoza, ya que los vuelos se iban llenando con la gente que no pudo volar ese día. Nosotros fuimos a la oficina de turismo a las 23, en la que una encantadora chica nos consiguió una pensión en una Bergamo llena de pasajeros por un día entero de vuelos cancelados. La pobre tuvo que trabajar más de la cuenta por la emergencia. El dueño de la pensión, Don Alfonso, nos vino a buscar al aeropuerto con su BMW todoterreno, porque no había manera de moverse con la nieve, y nos sorprendió con una habitación en una villa del siglo XV en medio de la preciosa ciudad antigua de Bergamo, con techos de 4 metros y mosaico en el suelo. Yo incluso fui a tomar una cervecita a medianoche, paseando por unas calles de cuento de Navidad, con 20 cms. de nieve, en las que las pocas tabernas abiertas invitaban a entrar con una luz cálida y un ambiente amigable.
Al día siguiente fuimos a imprimir nuestros billetes (Ryanair no los imprimía incluso a los que cambiaron sus vuelos en sus oficinas. Flipante, los pobres tenían que bajar a Bergamo ciudad para imprimirlos) y a ver la ciudad, ya que nuestro vuelo salía por la tarde. La ciudad es preciosa y comimos en una trattoria que no nos queríamos ir. Al final pedimos que nos llamaran un taxi para ir a por las maletas y al aeropuerto, porque no llegábamos... Lo bueno fue cuando nos dicen tras 10 minutos intentándolo que no hay taxis. Corriendo para el autobús y efectivamente, por la calle no se veía ni uno. Don Alfonso, el de la pensión, nos volvió a salvar. Belén consiguió que nos viniese a buscar y nos llevase al aeropuerto. Llegamos con 10 minutos de retraso sobre el límite del check-in, pero vamos, con el follón que tenían en el aeropuerto, no se atrevieron a decirnos nada. El aeropuerto era zona de guerra, con la cruz roja repartiendo agua y azúcar, los pasajeros tapados con mantas del ejército, un desastre. Cuando fuimos para la puerta de embarque, ya anunciaban un retraso de hora y media, con salida a las 18. A las 19, las pantallas seguían mostrando que salíamos con retraso, a las 18. Viva la compañía esta de bajo coste, jajaja. Como la cosa se ponía tensa en la puerta de embarque, nos fuimos a dar una vuelta, tras conseguir a duras penas que nos dejasen salir de la zona de embarque. Mientras charlábamos con unos chavales que iban para Madrid, Belén gritó: 'Que están embarcando!!!' y nos pegamos una carrera hasta nuestra puerta de embarque. Al parecer alguien había visto por internet que cancelaban nuestro vuelo y se armó una buena tangana en la puerta. Dio la casualidad que justo había aterrizado un avión y los pasajeros salían por la puerta de al lado, así que unos pasajeros de nuestro vuelo se fueron a bloquear la salida de ellos y consiguieron así que la compañía nos diese la luz verde a nuestro vuelo. Embarcamos y tras una hora de espera en pista, por fin salimos rumbo a Zaragoza, sobre las 22:30, con 8 horas de retraso. Qué alivio! Ya no me importaba que a esas horas no hubiese AVE a Madrid, el caso era llegar a España y de ahí ya veríamos.
Cuando estábamos ya en aproximación al aeropuerto de Zaragoza, el piloto nos suelta por megafonía: 'Parece que la mala suerte no se nos ha acabado aún hoy...' Se hizo un silencio, algunos pensando ya que se había estropeado el tren de aterrizaje o algo así. El problema era que en Zaragoza había demasiada niebla y que nos desviaban de aeropuerto a... MADRID!! Hubo un poco de revuelo entre el pasaje, pero yo estaba encantado. Lo más tierno fue cómo un chico de 17 años y estética Latin Kings se hizo cargo de una anciana que no sabía la pobre cómo afrontar la situación, su familia esperándola en Zaragoza y ella aterrizando en otro lado, posiblemente sin experiencia en estos casos. El chico la agarró de la mano y le dijo: 'No te sueltes de mi, que vamos a llegar juntos a Zaragoza' y desde entonces se quedó tranquila la mujer. Resultado, por fin, con día y medio de retraso, llegamos a mi casa y Belén se pudo ir a la suya al día siguiente en el AVE. Si el seguro de viaje además nos compensa los gastos (jajaja, alguien pensó que Ryanair se haría cargo de algo?), entonces la aventura incluso estuvo bien y todo!

Aquí en Madrid he tenido que trabajar por una perrada que nos hicieron una editora de artículos de investigación, y por eso no he podido ver casi a amigos o disfrutar de las vacaciones. Eso sí, el 30 fuimos a la Puerta del Sol, al ensayo general de las campanadas y ayer corrí la San Silvestre. Estaba tocado, pero la acabé, y algunos segundos por debajo de la hora!! Es increíble el efecto del público animando por las calles, aunque caía la del pulpo y estábamos todos calados hasta los huesos. Los peques poniéndote la mano para que la chocases al pasar hacían más llevadera la cuesta de la Albufera, cuando ya pensaba en dejar de correr. Al acabar nos metimos en el bar del año pasado, con Bruno, mi hermano y unos amigos suyos, y para mantener la tradición, espantamos el frío con 3 chupitos de vodka. No veas como lo pasamos. A la vuelta en el metro estuvimos hablando con un bombero que nos quería regalar una camiseta y el resto del viaje charlé con un padre e hijo canarios de San Borondón... Eso si, después de las uvas, no aguanté nada y creo que a la 1:30 acabé en la cama, el primero de todos en casa. Viva la Nochevieja sin salir!

Ahora deseo a todos un 2010 glorioso. Dicen que hacer lo siguiente trae suerte, así que todos a buscar un amuleto!


2.9.09

Otoño


Ya está aquí, NOOOOO!!! El fin de semana iba caminando por la calle dándole patadas ya a las hojas de color matutano. Es el fin!
Por lo menos también el dilema de los rodapiés llegó a su fin. Aunque por un lado, me dio un poco de pena dejar de dormir en el salón para volver a mi habitación. Me había montado un camastro histórico, juntando mis dos camas con el sofá. Había noches en las que no me podía volver a dormir si me despertaba, de lo desorientado que estaba en tal lecho XL.
Al final, entre la votación y los comentarios, me decidí por la solución rodapedal que podéis ver en la foto. Muchas gracias por su participación. Yo creo que está bien así, aunque más orgulloso estoy del trabajo de chapucería que tuve que hacer para que el rodapié cubriese el hueco entre la pared y el parquet. Ahora solo quedan unos detalles en el vestidor y mi habitación estará lista. Una buena estimación es 2012.
Y como todos los años, este también hubo lluvia de estrellas y cumpleaños en Agosto. Este año era un número redondo y coincidía con otro número redondo de años que llevo en Finlandia, así que decidí montarla un poco más grande en la sauna de Rajaportti, con la ayuda de Claudia y Jesse. Me asusté un poco al verme en el espejo de la evolución en el que se convirtió la invitación a la fiesta. Qué hay después? En cualquier caso, nos reunimos unos cuantos en la sauna y me hizo mucha ilusión que viniese gente que hacía mucho que no veía. De esta guisa me dejaron con los regalos, cada uno de ellos una pequeña sorpresa. Entre los más curiosos, unas películas soviéticas, una promesa de regalo en 2 semanas y una peli marrana de 4 horas de chicas de Helsinki, en VHS. Alguien sabe en dónde conseguir un VHS a estas alturas? Y el más tierno, la tarjeta de felicitación que me hizo la niña pequeña de Jarkko. En la sauna estuvimos hasta que se quejaron los vecinos. Luego intentamos ir al Inferno, pero resulta que a Pedro le extienden el destierro del Doris a más bares y acabamos unos en el Saha, otros en el Doris, los más en el Klubi. Allí también estaba el artista de los olores, pero esta vez no venía a embriagarse de mi, sino a regalarme un libro de poesías que ha escrito éĺ. Al final, todos tostados a casa. Unos tuvieron que irse antes certificados en taxi porque no veían ya por donde iban, otros llegamos a casa a las 10 de la mañana, pero la mayoría felices. En la sauna sableé las existencias de ibéricos (se lo comieron todo, los muy zampones), pero aún quedaba la última reserva para el desayuno de los campeones, incluída alguna cerveza. Con la barriga llena y un par de horas de sueño más, Anna y yo descubrimos el efecto del paso de la edad en el hombre: la caída del pelo. Y que en vez de mujeres bonitas, te rondan los murciélagos. Como le estoy cogiendo el gusto a esto de las encuestas, aquí a la derecha va otra. Quién parte más la pana, el greñas o el calvo? Si sale el greñas, aún me puedo volver a pegar el pelo que se me ha caído, que lo tengo aquí guardado.
Feliz septiembre a todos, ojalá algunos aún puedan pasar parte de mes en vacaciones.

13.8.09

Ayúdame con los rodapies.


Necesito poner unos rodapies y no se por qué color decidirme. Me echáis una mano? Podéis poner en los comentarios el razonamiento, si queréis. Pinchando en la foto se ve en detalle. A la derecha se puede votar, no se si funcionará.

3.8.09

El Antisexy

Poco a poco me voy aclimatando después del viaje a Siberia. Los primeros días, entre el jetlag y el cansancio acumulado, me despertaba sin saber en dónde estaba. Incluso un día me desperté pensando en las dos palabras de ruso que se.
Tantas historias, aventuras de acampadas, los Pilares del rio Lena, frigoríficos naturales del permafrost, trabajos de campo, privilegios de extranjero... no podría meterlas aquí en una entrada y probablemente no me quedaría satisfecho por la descripción insuficiente de los sentimientos. Un par de fotos sí que dejo por aquí, hay más en el jetabuk. La primera es en la cima de uno de los pilares. Y la segunda en el campo, ganándonos la cena.
De todas maneras, de vuelta en Finlandia se despliega la absurdidad del día a día. El jueves fui secuestrado por Jarkko para salir a tomar una cerveza. Claaaaro... como no se decir que no. El caso es que acabamos en el Klubi, y estaba yo tan tranquilamente hablando con Jesse, cuando un amigo suyo y conocido mío, que estaba sentado en el suelo entre los dos, me mete la mano en los pantalones y antes de darme cuenta, la saca (su mano) y se la huele!! Bueno, yo continuo hablando y ... zasss!!! otro ataque, otra vez lo mismo, pero por la retaguardia. Yo, en vista de que estaba dandole a la nariz, le ofrecí mi sandalia sudada y no tardó en darle una olisqueada por todos los ángulos. Al devolvermela me comentó que le gustaba conocer a la gente a través de los olores. Acabáramos! Me levanté la camiseta y le ofrecí mi sobaco chorreante de los bailoteos. Y allí mismo, delante de su esposa, metió la picota en mi axila y le dio un lengüetazo! Yo ya no podía aguantarme la risa, además de las cosquillas, así que di por terminada nuestra sesión de conocernos mejor.
Resacoso a la mañana siguiente iba yo caminando para la universidad, pensando en el intercambio de olores de la noche anterior, cuando se me cruzan dos ejemplares de Ciegazus Hervannansis femeninos, de unos 50 años. Con sus ojos medio cerrados de la borrachera, sus vestiditos de verano y una llevaba una caja de detergente de 5 kilos en la mano. Por sorpresa, una de ellas me para y me pregunta si me puede hacer una pregunta. Me pilló con las defensas bajas, ya que la primera regla con los borrachos finlandeses es ignorarlos, si no quieres que se te peguen como una lapa. El caso es que yo acepté la pregunta y ella se pone muy seria, cara pícara, de interesante, y me dice: 'Debajo de este vestido... crees que llevo bragas?' Tardé unos segundos en recomponerme y contestar con algo de dignidad: 'No lo se y realmente no me importa, pero a juzgar por los 5 kgs de detergente que cargas, debes de tener todas las bragas sucias en casa, así que no debes llevar.' Y seguí mi camino, dejándola contestando al vacío. Sólo el pensar en que podría ofrecerme una comprobación a la respuesta me daba escalofríos.
Por qué estas cosas me pasan con amigos esmirriaos o con borrachas 50añeras y no con bellas jóvenes de pieles tersas y pechos turgentes?
Menos mal que el domingo nos recuperamos en casa de la madre de Jesse, recolectando frambuesas, fresas y grosellas, pegándonos una buena sauna tradicional y haciendo amistad con los peques del barrio. Este acabó mordisqueando mi zapato... Me voy a comerme unas frambuesas, que están de vicio. Feliz agosto!