26.8.07

Están locas estas Finlandesas (Tobelix dixit)

Hoy no tengo fotos, solo texto plasta el día en el que tengo que resignarme al fin del verano. Se acabaron las terrazas y las minifaldas. BUAAAA!
Parte de la culpa de que no hay a actualizado con ningún texto la tiene Juan Pablo y su tercer comentario recomendando las aventuras del Capitán Contreras. Al final el pobre Capitán no puede reprimirse de contar cómo se cepilla a una brava íbera, jajaja.
El sábado pasado tuve que admitir que aquí en Finlandia también hay mujeres bellas... con mostacho. Todos los esquemas rotos! Y lo peor es que como es rubio el mostacho, no te das cuenta hasta que te has pinchado.
El martes fue otra vez día completo. VENCIMOS por fin en nuestro partido de futbol, quizás en parte porque los contrarios eran más viejos y acabados que nosotros. Yo metí el primero de los 2 goles de mi equipo. Cubierto de gloria y polvo del campo fui corriendo a cenar a casa del Mono, que nos había prometido cena japonesa. Madre mía, qué cosa más horrible! Arroz y una salsa de sobre que cuesta 0,6€ para todos. Menos mal que el Corocota sacó salmón, que si no morimos en el acto. Como el gran Corocota se iba a las 5 de la mañana para las Españas, sus amigos de verdad nos quedamos con él para hacerle compañía. Todos menos el Mono, que prefirió quedarse en casa siendo empalagoso como un membrillo. Fuimos a una fiesta universitaria (ya empieza el curso aquí) y a un bar lleno de nuevos Erasmus en Hervanta. Como la cosa estaba floja, fuimos a casa de Pedro a por la maleta del Corocota y continuamos el viaje al Doris, no sin antes haber diezmado los contenidos de la nevera del mono (el salchichón y chorizo que no nos sacó en la cena). El pobre Corocota estaba tan cansado que no supo aprovechar el ataque frontal de una chiquilla en el bar. Al menos se fue contento para casa.
El miércoles, jueves y viernes crucé el lago a nado, creo que el viernes fue el último día este año, el agua empieza a estar fría y se agarrotan las extremidades.
Cuando por fin conozco a una chica un poco interesante va esta y me dice que le gustan las mujeres. Espero que no haya llegado a esta conclusión justo después (y a causa) de conocerme! Realmente es la excusa perfecta para deshacerse de un hombre, pero te quedas pensando: 'Tan mal beso?'
El sábado por la mañana me estuve dando un paseo por el mercadillo de Tampere cuando me encuentro a una conocida. Esta conocida se había liado hacía algún tiempo con un amigo mío, llamémosle 'Pedlo'. Fueron dos noches de desenfreno etílico y el alcance del 'lío' es todavía objeto de debate, pero solo fueron estos dos días. Pues no se le ocurre otra cosa a la tipa esta que someterme a un exhaustivo interrogatorio acerca del 'Pedlo' este. Luego, que si ella le llamaba y él no le contestaba, que si podía llamarle yo en ese momento desde mi teléfono, para que contestase y luego pasarle el teléfono a ella. Vaya psicópata! Me largué rápido a comprarme unos boquerones y a refugiarme en la seguridad de mi casita en Hervanta.
La salida de ayer fue infructuosa. Me equivoqué en la elección del bar y cuando quise rectificar las colas eran tales en los otros sitios que no me lo pensé y me fui con el autobús nocturno que justo pasaba.
Feliz semana!
T

7 comments:

Juan Pablo Arenas said...

Tobías,no me dirás que no hay un Alonso de Contreras en cada gañán que quiere matarse en un semáforo por un adelantamiento mal hecho o en los animales que en Puerto Hurraco, antes de liarse a tiros con medio pueblo, se tomaron un chato de vino y luego se entregaron a la Guardia Civil como si tal cosa. Somos una gente peculiar y por eso leer esos textos a mi me ayuda a entender lo que somos.

Me sigue asombrando que las mujeres entren a los hombres en Finlandia. Tengo que ir a comprobarlo un día de estos.
JP

Tobias said...

Te espero por Suomi. A mi me pareció que Contreras no era un desquiciado de esos. Que trataba de obrar conforme con sus creencias de lo que estaba bien y lo que estaba mal. Quizás solo el reflejo de lo que era entonces lo normal.
T

Juan Pablo Arenas said...

Sí, sí. No creo que fuese un desquiciado. Tenía su honor y sus principios. Más del que podamos tener hoy en día seguramente. Me refiero más bien a que no hemos cambiado tanto, a pesar de que ahora seamos súper modernos e hiper solidarios y nos espantamos por la muerte de los bebés foca. Creo que nos parecemos más a Alonso de Contreras que a los patanes de Médico de Familia o Farmacia de Guardia.

Tobias said...

Jajaja. Médico de Familia o Farmacia de Guardia es un reflejo de lo que ahora es normal y de lo subnormales que somos ahora.
Por cierto, aquí en Finlandia triunfa una serie llamada Los Serrano. Mis amigos se parten porque pueda haber alguien que se llame 'Fructuoso.' Qué tal está esa serie?
T

Juan Pablo Arenas said...

Con mal veedor de teles hemos dado, que diría don Quijote. Veo poquísimo la tele, pero no por la pedantería de yo soy un espíritu selecto y no hago cosas propias del populacho, sino porque me gusta verla a solas y sin que me insistan en cambiar o que pasen por delante de mí o que masquen a mi vera. Uso el ordenador para ver pelis de la biblioteca -John Wayne, grandioso- pero la tele poco. Ahora me he bajado Zattoo, con el que puedes ver la tele hispana, aunque a veces va fatal. Los Serrano los vi alguna vez y pretenden conjugar el humor rudo español de toda la vida con lo políticamente correcto. O sea, un mejunje de pelotas. ¿Te imaginas a un tosco camarero español con los sobacos tocinescos viendo entrar a un marica y diciendo: “vaya, ahora se meten gays en mi bar”? Pues eso hacen los sesudos y progresistas escribidores de guiones que se creen que han de educar a la plebe y conducirlos por el buen camino. Cómo odio que me eduquen. Lo más patético del asunto es que es más irreverente una película de Tony Leblanc como “Los Tramposos” –qué espanto, dicen “paleto”, en lugar de decir “habitante rural con dificultades de alfabetización”- que cualquiera de estas series de hogaño. Es normal: cada guión lo certifica una de esas tenebrosas asociaciones de telespectadores que me recuerdan a aquellos añejos obispos que tras leerse un libro le ponían el “nihil obstat”.

Anonymous said...

Hola Tobias, cómo estás?? Siempre leeo tus historias, la verdad muy desorientada porque le perdí le hilo hace mucho a la historia de tu vida, pero quería saludarte: hola.
Un abrazo
Diana Vélez

Tobias said...

JP, John Wayne seguro que está prohibido, no ves que se cargaba a mogollón de americanos autóctonos? Eso es MALO, KK. Yo estuve disfrutando de los capítulos de Mazinger Z, y esos seguro que también están prohibidos por los obispos de la correctitud moderna. Vaya tortazos le mete Koji a Sayaka, y lo más efectivo para aplacar las emancipaciones de la chiquilla es decirle: 'Así nadie va a querer casarse contigo!' Mano de santo, oiga.
Diana, me avergüenzo de no haber mandado nada en un tiempo. Esta semana te escribo un correo. Espero que todo vaya bien en Bogotá y Medellín. Os echo de menos a los Vélez y a vuestro lindo país.